Una de las primeras creaciones de la Maison Givenchy fue L’Interdit, en 1957 se creó esta fragancia para la actriz y musa de la marca Audrey Hepburn. En 2018 se crea su versión moderna, basándose en el contraste entre un ramo exuberante de flores blancas e intensas notas amaderadas y terrosas. Un toque de flores blancas junto con notas intensas que desatan una atrevida luminosidad que coquetea con la oscuridad. La primera flor decididamente clandestina y subterránea con la que descubrir la exaltación de lo prohibido.
Las notas blancas como la flor de azahar, el jazmín y el nardo se entremezclan con las notas más intensas y misteriosas como el vetiver o el pachulí. Un intenso y generoso brillo que no teme a la subversión. Enfrascado en una botella de vidrio grueso que rinde homenaje a la forma original con un contorno más moderno y el logotipo de las 4 G agregado a la cinta negra que rodea su cuello.