Eau de Parfum para mujer incluida en la familia Oriental Especiada. Estamos ante una esencia que brilla por su potencia, de notas intensas y penetrantes, nos envuelve y nos inicia en una experiencia olfativa única, la cual hay que vivir mínimamente una vez en la vida.
Esta fragancia fue lanzada en el año 1996 por el perfumista Dominique Ropion. Con ella, quiso trasladarnos hacia las profundidades de una jungla tropical, un lugar repleto de fauna y flora exótica, un mundo imaginario lleno de colores y elementos exuberantes, colmado de contrastes, de origen salvaje y desconcertante. Un universo que tan solo Kenzo podría plasmar a la perfección, y así lo hizo, creando este perfume capaz de despertar pasiones.
Su pirámide olfativa, es prácticamente indescriptible, no existen palabras para transmitir lo que puede llegar a hacernos sentir, más bien es una aventura que hay que vivir sobre la propia piel.
Ésta inicia con mandarina, clavos de olor y comino, el dulzor cítrico se fusiona con especias aromáticas, que nos trasladan a un corazón impactante, en el que se combinan varios elementos contrapuestos, entre los cuales encontramos mando, ylang-ylang y regaliz.
Finalmente, su fondo se compone por ámbar, vainilla y pachulí, creando una atmósfera cálida y untuosa.