“Trabajo como comercial en una empresa tecnológica/industrial y paso gran parte de mi tiempo viajando, visitando clientes por la zona, sobre todo cerca de la frontera vascofrancesa. Ya hace algún tiempo, en uno de mis viajes, descubrí Perfumerías Idoia y, desde entonces, cada vez que estoy por la zona, no falto a mi visita.
La verdad es que no me complico demasiado con mi imagen, pero me gusta cuidarme: una buena colonia, una crema hidratante que me funcione y protector solar (sobre todo en verano). Y lo cierto es que aquí siempre encuentro justo lo que necesito.
Con el tiempo, mis paradas en Idoia se han convertido en algo más: además de llevarme mis imprescindibles, mis amigos y familiares aprovechan y me hacen sus propios encargos y así acumulo más ventajas en mi tarjeta de fidelidad. Aprovechan para pedirme sus productos favoritos porque saben que en Idoia siempre los encuentro.
La variedad, los buenos precios y la comodidad hacen que todo sea sencillo: entro, elijo lo que necesito (y lo que me piden) y sigo mi ruta. Hoy ya forma parte de mi rutina profesional: planear rutas, hacer visitas… y antes de volver, pasar por Idoia.”
— Unai